Recuerdo la primera vez que escuché a
alguien predicar sobre los roles bíblicos de hombres y mujeres. Las
Escrituras fueron usadas para mostrar cómo los hombres son los
líderes amorosos en sus matrimonios y cómo las mujeres están
llamadas a ayudar y someterse al liderazgo del hombre. Para ser
honesta, simplemente no me gustó como eso sonaba. "¿Una mujer
es una ayudante sumisa? ¿¡En serio!?" No estaba casada, y sin
embargo, mi corazón ya estaba experimentando apasionadamente un
deseo en contra de esto, como se predijo en Génesis 3:16. Continué
comprendiendo estas doctrinas, me convencí a través del estudio de
la Palabra, y llegué a amar y aceptar la verdad de que los hombres y
las mujeres tienen el mismo valor pero tienen diferentes roles
ordenados por Dios en los cuales deben operar. Vi lo que realmente
era ser una ayuda: un llamado y una tarea gloriosa. Sin embargo,
llegué a confundirme cuando busqué aplicar estas verdades a mi
vida. Casi todo buen artículo y recurso que encontré fueron
escritos para mujeres casadas. La mujer casada se somete al liderazgo
de su esposo (Efesios 5: 22,24; Col. 3:18); la mujer casada es una
ayuda para su esposo (Génesis 2:18); la mujer casada gana a su
esposo incrédulo sin palabras por su buena conducta (1 Pedro 3: 1);
la mujer casada honra y no blasfema la Palabra de Dios por sus buenas
obras (Tito 2: 5). ¿Qué hay de la mujer soltera? ¿Cómo se ve esta
doctrina en la urdimbre y la trama de la vida en soltería? En la
mano soberana de Dios, él me dio el don de la soltería más tiempo
de lo que había anticipado (el Señor me trajo a mi maravilloso
esposo Trevor a la edad de 29) y aunque deseaba mucho el matrimonio,
también deseaba seguir creciendo en santidad y obediencia a Jesús
durante este tiempo.
Plenamente mujer, seas casada o soltera
Plenamente mujer, seas casada o soltera
Como viví año tras año como una
mujer soltera, y vi a muchas de mis amigas casarse y tener hijos,
comencé a sentir como si me estuviese perdiendo el crecimiento
espiritual y el hecho de estar completa como mujer. Sentía que
cuando la Biblia hablaba a las mujeres, se dirigía principalmente a
las mujeres que jugaban para el "Equipo Matrimonio". Yo
todavía no estaba en el campo. Mi propósito en el Reino era difuso.
Cuando comencé a examinar detenidamente las Escrituras y
entenderlas, varias verdades se volvieron claras para mí.
La mujer soltera puede practicar ser
una ayuda en muchas áreas diferentes (Génesis 2:18). En Génesis 2,
Dios creó a la mujer para ser una ayuda para el hombre. Esto, por
supuesto, es en el contexto de ser una ayuda idónea para un marido.
La mujer soltera no sirve a ningún hombre, pero aun así puede
cultivar un corazón que ayuda y sirve. Sarah, una querida amiga mía,
vive su vida sirviendo y ayudando a su iglesia local, a las familias
de su iglesia, a su jefe en el trabajo, a sus amigos y a su familia.
De hecho, cada vez que el nombre de Sarah es pronunciado por las
personas que la conocen, siempre se habla de ella con una sonrisa y
el reconocimiento de que ella sobresale en servir a muchos.
La mujer soltera puede afirmar y
alentar el liderazgo masculino (Génesis 2:15, 1 Cor. 14) Los hombres
deben ser líderes en el hogar y en la iglesia. Las mujeres solteras
tienen la oportunidad de alentar este liderazgo por la forma en que
interactúan con otros hombres. Algunas formas prácticas de alentar
el liderazgo masculino son pedirles a los hermanos solteros que
dirijan la planificación de reuniones sociales, pidan a los hombres
presentes en las comidas que bendigan la comida, alentando y
agradeciendo a los ancianos y diáconos por su trabajo en la iglesia
y escribiendo notas de aliento para las parejas casadas y alabando al
Señor por el buen liderazgo que el esposo está evidenciando en su
familia.
La mujer soltera puede cultivar una
postura de sumisión a las autoridades que Dios le ha dado (1
Corintios 14:34). Una mujer debe cultivar una postura de sumisión en
su soltería para con sus autoridades terrenales, ya sean sus padres,
un pastor, un jefe o alguien más en autoridad hacia ella. Una mujer
debe hacer esto por dos razones: primero, Jesús lo ordena y ella se
parecerá más a Él al obedecerle. Esto es valioso sea que ella esté
casada a los 21, a los 71, o nunca. En segundo lugar, cuando una
mujer soltera aprende a someterse y honrar a las autoridades que Dios
ha puesto en su vida, el matrimonio terrenal será simplemente una
transición más fácil a comparación de que no haya sido así.
La mujer soltera puede desarrollar un
espíritu apacible y tranquilo (1 Pedro 3: 4). Un espíritu afable y
apacible no es una personalidad afable y apacible. Es muy posible que
una mujer tenga una personalidad afable y apacible, mientras que su
corazón se enfurece en rebelión contra Dios. Un espíritu afable y
apacible es un corazón que descansa y espera en el Señor (Salmo
131: 1-3). Pedro dice que esta es una belleza incorruptible y de gran
valor para Dios. Siempre le digo a la gente que mi abuela viuda de 80
años es la mujer más hermosa que conozco. Se ríe y se regocija en
la vida con sus hijos y nietos, tiene un corazón que ama conocer
gente y conocerlos bien, un corazón que sirve donde y cuando tenga
la capacidad, ora continuamente, y es la mujer más trabajadora y
generosa que conozco. Su corazón descansa firmemente y confía en
Jesús. Su belleza como mujer soltera viuda es de gran valor para
Dios y es incorruptible.
La mujer soltera puede practicar la
hospitalidad (1 Timoteo 5:10). La hospitalidad es un gran don que las
mujeres solteras pueden entregar. Durante varios años de mi
soltería, viví con increíbles hermanas que practicaban la
hospitalidad. No era raro que nuestra casa fuera un lugar de reunión
para comidas, baby showers, fiestas de cumpleaños, despedidas
misioneras, cantos de himnos y más. Dimos la bienvenida a creyentes
e incrédulos, grupos pequeños y grandes (¡una vez tuvimos a 65
personas!). Las oportunidades para el discipulado, el aliento y el
evangelismo abundan. Todos crecimos durante ese tiempo comprendiendo
la importancia de la hospitalidad y que podíamos cultivar esos dones
en nuestra soltería.
La mujer soltera puede ser una mujer
mayor para las mujeres más jóvenes (Tito 2: 3-5) Mi amiga Caitlin
tiene una de las mentes teológicas más agudas que he conocido y
tiene grandes dones para enseñar. Ella usa estos dones de
conocimiento y enseñanza en su soltería cuando discipula a otras
mujeres, solteras y casadas. Mi amiga Hannah ha caminado con amigas
suyos durante temporadas muy duras. Ella les ha enseñado lo que es
bueno y cómo caminar en el autocontrol y la pureza. Estas mujeres
son ejemplos de lo que parece ser una mujer mayor para las mujeres
más jóvenes, incluso en medio de la soltería.
La mujer soltera puede elogiar y honrar
el matrimonio regocijándose con aquellos que se regocijan en el
matrimonio bíblico (Romanos 12:15). Esta verdad se hizo realidad
cuando mi hermana menor se comprometió a la edad de 21 años. Yo
tenía 28 años y no tenía partido. Sentí el pecado agazaparse como
un león, listo para atacar; podía sentir la amargura y la envidia
arrastrándose en mi corazón. Durante los meses antes de su boda
trabajé para arrepentirme y regocijarme con mi hermana en su alegría
de casarse. El día de su boda, pude brindar con alegría como su
dama de honor. En retrospectiva, fue uno de los días más felices de
mi vida. Me di cuenta de la gracia que el Señor obró en mi corazón,
y estuve encantada por el buen regalo que es el matrimonio que fue
otorgado a mi hermana. Ella y su esposo ahora son otro ejemplo
viviente para mí de Cristo y la iglesia.
La soltería es como una señal
indicadora
La mujer casada es una señal, que le
recuerda a la iglesia cómo ser la novia de Cristo. La mujer soltera
también puede convertirse en un recordatorio similar. Con su
espíritu afable y apacible, su voluntad de seguir y someterse a la
autoridad de Dios, su deseo de ser una ayudante y una sierva en la
iglesia, es un recordatorio vibrante, que señala a Cristo y a la
iglesia. El mundo puede burlarse de una mujer vestida con tal fuerza
y dignidad, pero la novia de Cristo (la iglesia) será fortalecida y
animada.
Escrito por Amber Komatsu
Traducción: Pamela Morales
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Sobre la escritora
Amber Komatsu es la Coordinadora de
Servicios de Membresía de ACBC. Está casada con Trevor y espera su
primer hijo, Reuben.
Publicado 14 de Junio del 2016
Artículo encontrado en:
https://biblicalcounseling.com/2016/06/gender-roles-and-the-single-woman-2/
Gracias por publicarlo! Me encanto.
ResponderEliminarGracias por compartirlo!
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